Dic
14
2007

El Scalextric

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Scalextric - CajaEl Scalextric es un símbolo. Un juguete icónico al que todos hemos jugado, generación tras generación. Nuestros padres lo hicieron, y probablemente nuestros hijos también lo harán.

Es, en definitiva, un juguete clásico e intemporal, a la altura del Parchís o el futbolín. Aunque Scalextric no es la única marca dedicada a fabricar coches a tracción eléctrica en miniatura que corren por pistas especiales, sí es la marca más famosa, convirtiéndose su nombre en sinónimo del juego.

El nombre Scalextric proviene de la contracción de las palabras Scale X (o escala variable) y Electric. Esto se debe a que, al principio, la escala de los modelos era muy variable, aunque fiinalmente la escala se ha estabilizado en aproximadamente 1/32; aunque varia de un modelo a otro, especialmente en los coches de rally.

Existen, sin embargo, modelos de mayor tamaño, a escala 1/24, pertenecientes a la serie Super124, así como modelos en miniatura a escala 1/64 de la serie Micro Scalextric.

El inventor del Scalextric fue Fred Francis, un británico que mostró por primera vez sus coches en miniatura la feria anual de juguetes de Harrogate en 1957. En 1958 Minimodels, como se llamaba por entonces la empresa de Francis, no podía cumplir la elevada demanda de producción que tenían sus coches, realizados de forma artesanal, lo que le llevo a vender la compañía a Lines Bros Ltd. Sería una filial de esta compañía, Rovex, especializada en plástico, la que desarrollaría finalmente la marca Scalextric, reemplazando los coches metálicos por moldes de plástico.

Scalextric - Coches en plena carrera

Desde entonces la marca ha pasado por diversas manos, y desde 1998 es propiedad de TecniToys, el fabricante actual, responsable de la incorporación de la tecnología Scalextric Digital System.

Más de cincuenta años de historia para un juguete que sigue manteniendo el espíritu original: el de las carreras de coches en miniatura, controlado a través de un mando con el que podemos regular la velocidad a la que queremos que circule nuestro vehículo. Y esta será nuestra única responsabilidad: circular a la velocidad adecuada para ganar la carrera sin salirnos de la pista.

Scalextric - CircuitoSin embargo, para mi lo más divertido del Scalextric no era correr, sino colocar el circuito. Era el proceso de construcción en sí lo que más me motivaba, por eso me habría encantado tener cientos de piezas y crear todo tipo de trazados.

Pero como tenía pocas piezas, al final todo se limitaba a circuitos con forma de 8, que al menos tenían la gracia de tener un puente.

Era genial, por ejemplo el poder elevar dicha intersección a base de libros, de forma que a los coches les costara horrores ascender la cuesta. Luego si uno se metía en circuitos más elaborados, podían incorporarse toda clase de elementos: muñecos de playmobil como público, montañas hechas con papel de periódico pintado y mezclado con cola, carreras nocturnas (iluminando el circuito con un flexo)… el límite estaba en nuestra imaginación.

Y si uno se metía ya en el mundo de la competición profesional, había de todo. Gente que reparaba y cambiaba las piezas de sus miniaturas predilectas como si de un vehículo real se tratara, enormes circuitos de competición ambientados en distintas épocas del año, circuitos nevados (aquí la harina era un componente fundamental)… en definitiva, todo un universo a explorar.

Lo bueno de Scalextric es que las conexiones de los tramos de pista han permanecido prácticamente invariables, con lo que es posible conectar nuestras viejas pistas de hace 20 años con las nuevas compradas actualmente. Es cierto que con el tiempo algunas piezas pierden transmisión y es necesario sustituirlas, pero en general, son extremadamente duraderas.

Scalextric - SEAT 850Y eso por no hablar de los coches, cuyos modelos antiguos llegan a revalorizarse en eBay hasta alcanzar cifras astronómicas, superando los 300 y, en ocasiones, los miles de euros. Un auténtico lujo para coleccionistas y todo un negocio para los que heredaron el juego de sus padres en buen estado.

En definitiva, un juguete por el que no pasan los años, que hoy en día sigue tan de actualidad como en el momento de su creación, y que ha sabido actualizarse y renovarse a si mismo constantemente. Hoy en día, contamos hasta con coches tuneados, para recrear las carreras callejeras de videojuegos como «Need for Speed».

A modo de despedida, os dejo con un vídeo de lo que todos habríamos querido tener en su momento: el circuito de Scalextric más largo del mundo. Como se te salga el coche en una curva debe ser toda una gracia tener que cruzar toda la pista para recolocarlo:

Fuentes

Scalextric (Wikipedia en español)
Scalextric (Wikipedia en inglés)

También en ion litio…

Pro Action Football
El futbolín
G.I. Joe

Etiquetas:

Categorías: Juguetes-juegos

17 comentarios

  • Anonimouse
    14/12/2007 | 6:51

    Te creerás que yo nunca e jugado? No se, nunca me llamó la atención eso de ver coches dando vueltas por el mismo recorrido

    Responder a Anonimouse
  • Drugo
    14/12/2007 | 7:46

    Soy un fan del scalextric. en mi ciudad (igualada) se hace el torneo de españa de este juego. hay una fiebre loca.

    Responder a Drugo
  • Calintz
    14/12/2007 | 7:49

    Ains, que recuerdos… XD

    Yo tuve una época dorada del Scalextric gracias a un gran amigo que me hizo descubrír precisamente el mundo de la competición del mismo. En la delegación de juventud de Móstoles, los sábados por la mañana se hacían carreras y había liguilla con sus premios y todo (no, nunca gané nada XD).

    Lo mejor eran precisamente la ambientación que se les daba a los circuitos, con elementos como la ya mencionada harina para simular nieve, el colacao para hacer lo propio con el barro e incluso los tramos a los que se les habían provocado oquedades a base de mechero o lima para que tuvieran un perfíl irregular y darle dificultad al asunto, y el intercambio y venta de piezas para mejorar los vehículos, desde neumáticos con o sin llantas hasta chasis aligerados para hacer que los coches corrieran más…

    Los únicos puntos negros que realmente le puedo llegar a ver al Scalextric son su elevado precio (para hacerse una pista decente hay que gastarse una gran suma de dinero, y ya ni mentar los coches) y que si te metes en el mundillo de la competición llega a hacerse pesado el tener que practicar tu sólo a contrarreloj, por lo demás, un juguete clásico que jamás pasará de moda y al cual me encanta ver jugar a los chavales.

    Deus, perdón por el tochazo, pero es que me emociono hablando de esta afición… XD

    Responder a Calintz
  • Calintz
    14/12/2007 | 8:18

    Por cierto, se me olvidó mencionar que tenía dos BMW M3 con luces delanteras y traseras, un Renault Megane WRC, un Audi Quatro con tracción a las cuatro ruedas (mediante gomas elásticas), un Lancia Delta, un Subaru Impreza WRC, un Mitshubishi Lancer EVO y un McLaren de F1, pero para las competiciones el elegido era siempre el Megane o el Audi, como corrían los diablillos…

    Responder a Calintz
  • Iván
    14/12/2007 | 9:18

    Una parte de la mágia de la paternidad.
    Hace 10 años que se estropeó mi scalextric, el del clásico 8, y este año los reyes le traen un scalextric a mi hijo, el lo pide con devoción, lo que no sabe es que me hace más ilusión a mi que a él.

    Responder a Iván
  • Manuel
    14/12/2007 | 10:15

    Yo tuve la TCR (Total Control Racing) que se adelantó a Scalextric, hace más de 20 años, en ofrecer la posibilidad de circular por cualquiera de los carriles.

    El Scalextric se lo regalamos al niño el año pasado, por Reyes.

    Le cayó el de Rally en nieve, y la verdad es que los coches están muy bien y las pistas muy chulas.

    El único problema que le veo es que no se puede cambiar de carril, y coincido contigo en que lo más divertido es montar las pistas.
    Y si ya te lo montas como muchos fans de Slot, que se curran auténticas maquetas con todo lujo de detalles, pues mucho mejor.

    Lo malo, es que esto último requiere de que tengas mucho sitio libre para montar las maquetas y dejarlas ya preparadas.

    Responder a Manuel
  • saruman
    14/12/2007 | 14:47

    Manuel yo también tenía un Tcr los coches eran más pequeños pero se podían hacer adelantamientos y tenían luces de los mejores regalos de reyes que me han hecho, el año pasado me entro el mono y me compre la pista Ninco(es el Escalextric muy mejorado pistas más anchas con mucho mas grip y mejores conecsiones de pistas) más grande que se vendía y dos expansiones mas 15 metros de pista jejeje y sigue molando mucho eso si me gaste media paga.
    Ahora lo quiero pasar a digital que es una pasada 8 coches en los dos carriles se pueden programar pit stops y un montón de cosas.

    Responder a saruman
  • León
    14/12/2007 | 14:51

    La de pistas de scalextric que he lijado para que los coches cogieran corriente xD

    Responder a León
  • Dani
    14/12/2007 | 17:18

    La de horas que habré jugado… Y ese olor a goma quemada… ¡Ah!, que recuerdos. Me acuerdo cuando me compré un contador de vueltas, qué ilusión me hacía la chorrada.

    Responder a Dani
  • K3M#
    14/12/2007 | 19:22

    Yo tuve unos pero marca pirata XD.

    Responder a K3M#
  • humphr3y
    14/12/2007 | 19:42

    ¡Mi Unicornio!

    Responder a humphr3y
  • Melkor
    14/12/2007 | 21:23

    Aún me recuerdo de enano, repeinando los hilillos de cobre de los bajos intentando que funcionara algún coche demasiado escacharrado 😀

    Nunca fui un superfanático del Scalextric (de hecho, los que tuve también fueron todos piratas 😉 ) pero es un icono que todo niño de probar al menos una vez ¿no? xD

    Gran artículo 🙂

    Responder a Melkor
  • Yen_lo
    15/12/2007 | 16:21

    Menudos recuerdos con el Scalextric. Me pasaba horas y hoas jugando con un coche de LeMans que tenia. Lo malo era que la pista me ocupaba todo el salon y cada dos por tres lo tenia que montar y desmontar todo.

    Responder a Yen_lo
  • JuMaFaS
    16/12/2007 | 3:22

    Jo, en casa de mis padres anda el scalextric con sus tropecientas pistas y sus 8 coches.

    La de horas que me tiraba jugando solo haciendo cronometrajes de cada coche y llevando una clasificación.

    Y como dice Rafa, lo mejor el montar las pistas, para cada carrera que hacía me montaba dos pistas que hacía en los dos sentidos, menos mal que fuí comprando tramos de esos pequeños y de curvas con diferente rádio lo que me permitía mucha libertad para hacer circuitos de todo tipo. 😀

    Y otra cosa que me encantaba era hacerle el mantenimiento a los coches, lubricar el motor y los soportes de los ejes, limpiar la escobillas del motor, repasar las trencillas de contacto. 🙂

    Algún día me traeré el scalextric para mi casa y tendré que recordar viejos tiempos. 🙂

    Responder a JuMaFaS
  • aik
    16/12/2007 | 15:41

    aiiiins que recuerdos de la infancia… frustrada porque jamas tuve uno y mis padres me decían que eso no se lo pidiera más a los Reyes Magos que ellos sabían que en mi casa no había sitio para circuitos…..

    Genial el post, me ha gustado mucho saber el porqué del nombre. No lo conocía. Muy interesante.

    Por cierto me flipa el hecho de que un juguete de hace 50 años siga generando tanto interés gracias a que ha sabido renovarse y actualizarse, como dices tu.

    Responder a aik
  • TCR
    25/07/2009 | 18:04

    Pues yo sigo siendo fan de TCR, aunque ahora sólo se encuentran cosas por ebay.

    Tengo una colección de más de 150 modelos y un circuito de más de 30 metros que pienso ampliar.

    Podéis echar un vistazo a mi web con fotos e información: TCR

    Responder a TCR

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